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Hola, mi nombre es Annia y os voy a contar mi experiencia durante la Navegación Todo Glaciares 🙂 ¡Una vivencia inolvidable!
Al igual que la mayoría de los tours de El Calafate, el día antes de la navegación nos enviaron un whatsapp para confirmar la hora de recogida en nuestro alojamiento, a las 7:15h teníamos que estar listas. También nos enviaron un QR que nos serviría para embarcar en la navegación y nos recordaron que la entrada al Parque se podría comprar online o directamente allí en persona.
Nosotras habíamos estado en el Parque el día anterior así que enseñamos nuestro ticket de entrada y nos hicieron el descuento del 50%, por lo que esta vez pagamos 15.000 ARS. En esta ocasión no llevábamos efectivo por lo que pagamos con tarjeta. La conexión era mala y fue un poco más complicado… por lo que recomendaría llevar siempre efectivo (ten en cuenta que tampoco aceptan todas las tarjetas y el pago sólo se puede hacer con visa crédito)
Entrada al Barco Todo Glaciares
Una vez teníamos la entrada nos pusimos a la cola para enseñar nuestro QR y poder embarcar. Nos dijeron el nombre de nuestra navegación para poder encontrarla y como teníamos la comida incluida nos dieron un ticket para consumir un café a bordo.
Embarcación al crucero Todo Glaciares
¡Ya estábamos listas para la aventura! Andamos unos metros por el puerto hacia nuestra navegación y subimos. Al entrar buscamos asientos, la parte de abajo ya estaba llena por lo que subimos arriba y nos colocamos al lado de la ventana para tener buenas vistas. Tal y como te informan los guías, durante todo el trayecto debes ocupar los mismos asientos y no puedes cambiarlos.
Y ahora sí ¡estábamos en marcha! A bordo nos acompañaban guías que con un micrófono te iban explicando. Primero las medidas de seguridad, después la dinámica e itinerario del día (las distintas paradas y horarios que íbamos a seguir) y luego dando explicaciones durante todo el trayecto sobre los glaciares. La verdad aprendimos un montón, me pareció muy interesante conocer datos como cuánto medía cada glaciar, así como de la historia y evolución de los mismos.
¿Sabías que el glaciar Upsala, ubicado sobre el brazo Norte del mismo lago, es el glaciar más grande? Tiene un largo de 50 km y un ancho de casi 10 km.
Durante el trayecto puedes permanecer en tu asiento o puedes salir a la zona de fuera para disfrutar de las vistas. Nosotras fuimos a inspeccionar la navegación, abajo estaban los baños y la cafetería así que decidimos pedir nuestro café.
A lo largo del día se hacen tres paradas fotográficas a los glaciares más grandes e importantes del Parque: Hein, Upsala y Spegazzini. La navegación permanece parada durante unos 15 minutos para poder observar y disfrutar del paisaje de una forma más detenida. Es el momento perfecto para salir e inmortalizar el paisaje con algunas fotos, así como para realmente contemplar la grandiosidad de los glaciares y el entorno.
Una agradable parada en el Refugio Spegazzini
Antes de la tercera parada en el Glaciar Spegazzini, desembarcamos en el Refugio Spegazzini donde tuvimos 2 horas libres para comer y recorrer la zona. A través de unas pasarelas accedimos al Refugio, que cuenta con unas vistas privilegiadas y donde nos esperaba una deliciosa comida.
Información – Cuando haces la reserva de la Navegación Todo Glaciares puedes elegir entre 3 menús:
– Opción clásica: empanada de carne y goulash de guanaco
– Opción clásica 2: ensalada y cazuela de cordero
– Opción Vegetariana: empanada de verdura y cazuela de lentejas y vegetales
Todos los menús incluyen una bebida sin alcohol y el postre de mousse de chocolate blanco y negro.
* También tienes la opción de llevar tu propia comida y calentarla en el Refugio.
Como éramos dos, tuvimos la suerte de poder degustar tanto la cazuela de cordero, como el goulash de guanaco. Aunque ambas opciones nos gustaron, mi recomendación es probar el goulash de guanaco. Es una comida típica de la zona que no puedes comer en otras partes del mundo ya que el guanaco es un tipo de lama que habita solo en algunas zonas de América del Sur, como en la Patagonia.
Después de comer recorrimos los alrededores del Refugio, a través de los senderos que te llevan a distintos miradores, a la orilla de la bahía y recorren la zona de bosque. Te encuentras con áreas de descanso y muchos carteles informativos dónde conocer más sobre el lago, los glaciares y las montañas que te rodean. ¡Un hermoso lugar donde realmente desconectar y conectar con el entorno natural!
Última parada: el Glaciar Spegazzini
A las 1:30 pm volvimos a la Navegación Todo Glaciares y nos pusimos en marcha hacia la última parada del día, que se encontraba a tan solo unos metros: el glaciar Spegazzini. Fuimos muy afortunadas ya que pudimos presenciar todo un espectáculo como son los desprendimientos del glaciar. Para mi fue un momento impresionante, con el ruido y el movimiento del agua que esto genera.
Finalizada la última parada, empezamos a navegar de vuelta al puerto. Un trayecto de menos de una hora y media donde se recorren 60 km. La vuelta fue tranquila, la gente estaba cansada y se notaba porque la mayoría ya permanecía en sus asientos, ya no había casi nadie fuera y algunos incluso aprovechaban para echar una cabezadita. Nosotras seguimos disfrutando de las vistas y de ese momento único recorriendo el Parque Nacional Los Glaciares.
A las 4 pm llegamos a Puerto Banderas y dijimos adiós a la Navegación Todo Glaciares. En tierra nos esperaba el conductor que por la mañana nos había traído, y nos llevó de regreso al alojamiento de El Calafate finalizando así un día inolvidable.
