Cosas que hacer en el Parque Nacional de Thingvellir

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El Parque Nacional de Thingvellir es una de las principales paradas del Círculo dorado y no es de extrañar, es naturaleza en estado puro. Lo puedes comprobar en tu viaje a Islandia y descubrir el origen de la isla. Para ello te vamos a contar todo sobre las cosas que hacer en el Parque Nacional de Thingvellir. ¡Empezamos!

Eso sí, primero debes saber que el parque se divide en varias zonas, todas igual de sorprendentes. Por un lado, puedes caminar por un campo de lava cubierto de árboles y después está la zona de Leirar, dónde están los puntos más turísticos (hoteles y restaurantes). Ahora sí que sí, ¿estás preparado para descubrir a Thingvellir?

El gran mirador

Al comienzo de tu aventura por el Parque Nacional de Thingvellir, te recomendamos observar desde las alturas las vistas ¡son una pasada! Para ello tienes un gran mirador, muy cerca del centro de información turística. Desde ahí se ve el inmenso valle y el lago más grande de Islandia, Pingvallavatn.

Las espectaculares fisuras

Este parque es conocido por situarse sobre dos placas tectónicas. Gracias a su movimiento, Islandia va creciendo en territorio año tras año. Es un must visitar Thingvellir y acercarte a ver sus fisuras.

Caminar por la grieta Almannagjá (al oeste) o por Hrafnagiá es una experiencia única. Así que imagínate hacer snorkel en Silfra, una grieta que llega a tener una profundidad de 40 metros. Este lugar es uno de los mejores para hacer buceo del mundo, gracias a su agua cristalina puedes observar con claridad las paredes verticales de roca negra.

Además, con el tour por el Círculo Dorado, tienes un plan más completo: hacer snorkel en Silfra y recorrer una de las rutas más famosas del país, donde verás la cascada de Gullfoss.

Cascada de Öxarárfoss

Uno de los lugares más conocidos de la reserva es la cascada de Öxarárfoss. No destaca por su tamaño o altura, pero la caída del agua cristalina es impresionante.

La Cascada está en la fisura de Almannagjá, cerca del antiguo parlamento del país. Desemboca en el lago Thingvallavatn, que con 83 km2, es el lago más grande de Islandia. Merece la pena visitarlo.

Muy cerca de aquí está la cascada de Gullfoss que es de las más famosas de la isla, así que si tienes la oportunidad te reocmendamos acercarte también.¡Esto se pone emocionante!

La fauna

Mirar detenidamente a los animales salvajes del lugar tiene algo mágico , ¿no crees? Te aporta calma y siempre aprendes cosas nuevas. Y es que una de las cosas que hacer en el Parque Nacional de Thingvellir es observar su fauna.

No es que haya una gran cantidad de especies pero los animales que habitan aquí son únicos, endémicos. Podrás ver al visón americano, al zorro polar y a un montón de aves diferentes 🙂 .

Thingvallakirkja: la primera iglesia de Islandia

Uno de los rincones con más historia del parque es la iglesia Thingvallakirkja. Este monumento se encuentra en el valle central y ha estado en el mismo sitio desde el año 1000 aproximadamente.

Lo que podemos visitar a día de hoy fue construido en 1859, es decir, la estructura original de la iglesia ha ido desapareciendo con el paso del tiempo. Junto a ella encontrarás una granja y la residencia de verano del primer ministro de Islandia. Esta residencia estival tenía el techo de césped y era inmensa, con tres frontones.

Hacer senderismo por esta zona es impresionante. Muy cerca de esta iglesia te encontrarás diferentes ruinas y te podrás teletransportar a la antigua Islandia. Un gran punto a favor es que en esta zona no hay casi turistas, es muy probable que vayas y estés solo.

Lögberg (la Roca del Rey)

Como hemos dicho antes, el parque está lleno de historia, desde el origen de la isla con el movimiento de las placas tectónicas, hasta la primera iglesia del país. Pero, hay algo más, te presentamos a Lögberg, donde se creó el parlamento islandés.

Este rincón también es conocido como la Roca del Rey, donde se hacían asambleas, juicios… Como dato curioso, una de las penas era ahogamiento en las aguas del río Oxará.

A día de hoy no se conserva nada del edificio pero tiene algo mágico poder visitar el lugar que ha marcado la historia del país.

Esta maravilla de parque natural tiene mil senderos por los que podrás hacer diferentes rutas de senderismo e ir viendo cada uno de los puntos que te hemos destacado. Ahora sí que sí tienes todas las cosas que hacer en el Parque Nacional de Thingvellir. ¿Ya sabes qué planes hacer en el parque?